La Pluma, el Faro
y la Llama

Tres voces, un solo corazón

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Manifiesto

Lauren Cuervo

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"En la oscuridad más profunda, la tinta se vuelve sangre seca y las palabras, armas tajantes."

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Soy el filo que corta la niebla. Escribo desde los extremos del tiempo: el pasado inquisidor y el futuro fragmentado. Mi narrativa arde en los márgenes de la historia, donde el poder y la culpa se codifican en carne y circuitos. Habito mundos donde la tecnología no redime, sino altera. Donde cada palabra es un ritual de exorcismo simbólico, y cada personaje arrastra el peso del peso de su época. No ofrezco consuelo: atravieso el alma con preguntas que sangran.

A.C. Elysia

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"Entre las estrellas y el mar, las palabras son plegarias que sanan el alma y el
cuerpo."

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Soy la voz que danza con los símbolos. Habito el ritual, la belleza y el susurro. Escribo para redimir, para recordar que el deseo puede ser altar y que la ternura también resiste. Desde oráculos, faros y cuerpos desnudos, invoco la palabra como puente entre lo humano y lo divino. También leo el porvenir en arcanos andróginos, donde cada carta es un espejo del alma. Escribo desde la contemplación y la pasión.

Draco Sahir

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"Todo lo pequeño puede ser gigante, si se atreve a soñar, a aventurarse y
a confiar."

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Soy el guardián de las estrellas de cartón y los corazones que aún creen en los milagros. Vivo en las nubes de algodón y la neblina centelleante. Escribo para los niños que ríen, que lloran, que se hacen preguntas grandes con voces pequeñas. Le hablo a las familias que se buscan y reencuentran. En mis historias, los planetas caben en una caja de zapatos, y un huevo puede volver a nacer si halla un hogar con amor.

En este templo de palabras, estas tres voces no son contradictorias, sino complementarias. Como las tres fases de la luna o los elementos de un ritual antiguo, Lauren Cuervo, A.C. Elysia y Draco Sahir son manifestaciones distintas de una misma esencia creativa. Son la sombra, la luz y el asombro; la cicatriz, la plegaria y la risa.

La Pluma rasga la superficie con crudeza y coraje. El Faro ilumina desde la contemplación y la pasión. La Llama arde con la magia inocente de los que creen, aún, en cohetes de cartón y estrellas que hablan.

Este espacio es sagrado porque no niega ninguna de sus partes. Porque en sus historias, la violencia puede encontrar redención, la espiritualidad puede tener cuerpo, y la infancia puede ser oráculo. La trialidad nos recuerda que somos multitudes en un solo aliento.

Aquí, las palabras son tanto armas como bálsamos. Las historias, tanto espejos como portales. Y nosotros, como escritores, somos tanto el navegante extraviado como la brújula y el astro polar.

Bienvenido a este viaje entre tres mundos. Bienvenido a La Pluma, el Faro y la Llama.

Lauren Cuervo & A.C. Elysia & Draco Sahir